Soy Lucía, nací en 1997 en Rosario del Tala y desde hace algunos años vivo en Crespo, Entre Ríos.
Después de trabajar como mesera y buscar un ritmo de vida más tranquilo, comencé en una tienda infantil donde noté algo que me llamó la atención: la falta de opciones de calzado infantil que combinaran comodidad, estilo y calidad.
De esa observación nació Pepes, un emprendimiento que creció a base de esfuerzo, creatividad y mucho amor por lo que hago.
De chica, mi mamá llamaba “pepés” a los zapatos, y ese recuerdo me quedó grabado.
Cuando llegó el momento de elegir el nombre, quise que transmitiera ternura y cercanía, algo que identificara no solo los productos, sino también la experiencia humana detrás de cada par de zapatillas.
Pepes no es solo una tienda: es un espacio donde cada cliente —papás y peques— se sienta bienvenido, escuchado y acompañado.
Cuidamos cada detalle: desde la elección de modelos con comodidad y diseño, hasta los colores suaves y armoniosos que reflejan mi estilo personal y la identidad de la marca.
Porque para mí, vender zapatos no es solo una transacción, sino una experiencia cálida y humana.
Hoy Pepes es un proyecto que llevo adelante principalmente yo, con la ayuda de personas que me acompañaron en distintas etapas del camino.
Cada logro fue posible gracias a la constancia, la confianza de los clientes y el deseo de seguir creciendo en el rubro.
Tenemos grandes proyectos para el futuro de Pepes.
Mientras tanto, seguimos apostando a marcas nacionales, buscando cada día más calidad, más estilo y más sonrisas en los pasos de los más chiquitos.
